Calle arriba me encontré con ellos
en lo alto está todo lo que no envejece
arriba de la calle nace la fuente que riega la vida de los sabios
camino de la punta de la cuesta no hay paseantes… ellos…
prefieren las sombras de la mansa arboleda de abajo.

 

Calle arriba hay templos vacíos… habitados por veloces pájaros de colores
y arriba de la calle… los hombres no recuerdan sus nombres
muy arriba… ya no se mide la altura
… y mientras las nubes de abajo guardan los ruidos que no llegan arriba de la calle…
ningún murmullo irrumpe en lo alto.

 

Allí donde no hay nada interesante en los ojos que miran desde abajo
me encontré con ellos.
Hermanos y amantes son, dioses e hijos de dioses ellos
… solo en lo alto de arriba hay tanta belleza;
él… herrero, tullido y magnífico,… fundió y forjó las armas de Zeus, Poseidón y Hades;
ella… esplendor de la guerra y la sabiduría,… virgen y amante, Hellas de mar a mar.

 

Fatigado, camino de la fuente de arriba los encontré…
Atenea y Hefesto son las mismas aguas de la fuente que resbala hacia los hombres que suben
… con sus ojos vacíos… ellos miran y ven las entrañas de los que ascienden
los ojos de la carne… solo sirven nubes abajo;
la diosa, el herrero y los pájaros de colores son la puerta de lo más alto
… allí, descampados de silencios y guerras íntimas aguardan
pero los hombres que suben…
son retenidos por la sed que exige el sol.

 

Ellos son agua de la fuente, llave y permiso para ascender
ambrosía… en lo más alto de la calle
es veneno… en la arboleda, sus plácidas sombras, vidas y negocios;
… se bebe entre piedras y musgos, hincada la rodilla, a los pies de los inmortales.

 

Y mientras mata el delicioso veneno del manantial…
él y ella y los emplumados hablan al oído del llegado hasta allí.
Naciente en lo alto es… quien escucha las voces de las aguas atravesando como flechas
y, el hombre, nunca jamás dice nada… de lo que sucede en lo alto de la calle
donde ambrosía es solo allí… y muerte, calle abajo.